El 5 de agosto se desarrolló en el salón “La Usina” la segunda jornada de cannabis medicinal en la provincia de La Pampa. La concurrencia fue masiva: jóvenes, adultos, padres, abuelos y familias se acercaron a informarse y consultar a los especialistas sobre el uso terapéutico de una planta que lleva el estigma de ser la fuente de la marihuana, pero que para mucha gente se ha convertido en el elemento esencial del alivio a sus dolencias.
Publicada en septiembre de 2017
Algunos llegaron por curiosidad, otros se acercaron a profundizar un poco más el conocimiento y a sacarse dudas. Hasta hace unos años se hablaba poco del uso del aceite de cannabis, pero en la actualidad, una sociedad más receptiva hacia su utilización, permitió que se sancionara por unanimidad hace cinco meses la Ley 27.350 en el Congreso de la Nación, que habilita el uso terapéutico del cannabis.
La apertura estuvo a cargo de sus organizadores, Paola Ruggero y Rodrigo Catalano, papás de Iñaki, un niño que padece epilepsia refractaria, y que tras años de infructuosos tratamientos con drogas tradicionales, encontró una notable mejora en su calidad de vida al tratarse con aceite de cannabis. Milton Fernández, secretario general del Sindicato de Prensa de La Pampa Zona Sur, coorganizador de la jornada, destacó la importancia y los objetivos del evento: “es para educarse, para informarse y apostar al crecimiento del conocimiento colectivo, médico, científico y su uso medicinal”. Los tres remarcaron la importancia de luchar contra un derecho postergado, que es el derecho a la salud de aquellas personas que encontraron en el aceite de cannabis una alternativa a la medicina tradicional.
Los primeros expositores fueron Daniel Oliveto y AyelénVitale, que mostraron su estudio científico “La experiencia del cannabis medicinal en La Pampa” expuesto en el Primer Congreso Argentino de Cannabis y Salud que se llevó a cabo en la Universidad de La Plata a mediados de este año, en el que prestaron especial atención al sistema endocannabinoide, un sistema que se encuentra en todos los seres vivos y funciona como un mecanismo de conexión entre células que reconocen las moléculas de aceite de cannabis. A través de este sistema, cuando el cannabis ingresa al cuerpo, las moléculas envían “mensajes” que son interpretados por el cerebro, y generan un efecto terapéutico en distintas patologías. Los estudios sobre cannabis y sus efectos terapéuticos se empezaron a realizar a partir de la década del 60 y comprobaron científicamente que sirven como antipsicóticos, antidiabéticos, antiinflamatorios, y promueven activaciones óseas, entre otros beneficios.
El evento siguió con las charlas de María Fernanda Alvez y DesiréeMacrini, presidenta y secretaria respectivamente de la organización “Rescata”, una red solidaria que responde consultas sobre el cultivo y sus recursos medicinales, y brinda asesoramiento médico, social y legal. Desirée es, además, representante del Frente de Organizaciones Cannábicas Argentinas (FOCA), que se empezó a organizar a partir de abril de 2017 y ya agrupa a más 20 organizaciones en todo el país.
La ley
Por su parte, el abogado y director del Centro de Estudios de la Cultura Cannábica (CECCa), Luis Osler, explicó los principales ejes de la Ley 27.350 que permite el uso medicinal del cannabis y sus derivados, y que en su artículo 1° establece el marco regulatorio que permite la investigación médica y científica con finalidades terapéuticas, medicinales y/o paliativas del dolor, de la planta y sus derivados, garantizando y promoviendo el cuidado integral de la salud.
La norma propone un Programa Nacional que coordinará el Ministerio de Salud y autoriza a organismos como el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y el CONICET a llevar a cabo una investigación científica y a producir aceite en laboratorios públicos. Por otro lado, gracias a la ley, se podrá importar aceite de cannabis y derivados para pacientes que presenten patologías incluidas dentro del programa y que cuenten con la proscripción médica requerida.
El artículo 8 establece la creación de un registro confidencial de pacientes que utilicen cannabis con fines medicinales, para evitar la sanción con multas y prisión como dispone la ley 23.737 para quien “siembre o cultive plantas o guarde semillas, precursores químicos o cualquier otra materia prima para producir o fabricar estupefacientes, o elementos destinados a tales fines”. Sin embargo, hasta que la reciente ley de cannabis medicinal no se reglamente, estas medidas no entrarán en vigencia.
Historia
A su turno, el autor del libro “Marihuana. La historia. De Manuel Belgrano a las copas cannábicas”, Fernando Soriano, y el director y cofundador de la revista THC, Sebastián Basalo, expusieron sobre la relación histórica de la sociedad con el cannabis, dando cuenta de que su uso medicinal no es nuevo, sino que se remonta a unos 5 mil años.
La jornada finalizó con los testimonios de Valeria Salech, referente de Mamá Cultiva Argentina, y Pablo Pérez, cultivador solidario de esa misma entidad, y quien explicó el proceso de extracción de aceite de cannabis. Mamá Cultiva es una ONG que nació en el 2015, y fue la principal impulsora de la Ley de Cannabis Medicinal en Argentina. Además brinda información y busca mejorar la calidad de vida de pacientes a través de su uso medicinal.
Los organizadores
El evento estuvo organizado por Paola Ruggero y Rodrigo Catalano, mamá y papá de Iñaki y cofundadores de Cannabis Medicinal La Pampa, junto con el Sindicato de Prensa de La Pampa (Sipren). La jornada contó con el apoyo de la Cooperativa Popular de Electricidad y fue declarada de interés municipal por el Concejo Deliberante de la ciudad de Santa Rosa, y de interés provincial por la Cámara de Diputados de La Pampa.
*Silvina Llames es periodista. Fotos: gentileza Sipren Zona Sur