Como cada año, desde hace más de dos décadas, la CPE desarrolló su programa de talleres cooperativos, con algunas particularidades y nuevos desafíos, pero con el mismo compromiso de siempre. Alrededor de 150 participantes se distribuyeron en actividades diversas, durante el año que sumó espacios cedidos por el Sindicato de Telecomunicaciones y la Facultad de Exactas y Naturales de la UNLPam.
El colapso de una parte del techo del área de atención al público, el primer día de enero, obligó a replantear prioridades y espacios, donde muchos sectores que trabajaban allí debieron reubicarse, ocupando así lugares donde habitualmente (la Usina, como ejemplo concreto) se desarrollaron muchos de los talleres y otras actividades artísticas. Este hecho no supuso un obstáculo para el desarrollo de los talleres pues el Consejo de Administración, fiel a su compromiso con la cultura y la solidaridad, aseguró las actividades previstas, reubicando las mismas en otros espacios. De esta manera, en el mes de mayo, se dio luz verde al lanzamiento de los talleres.
La primera etapa incluyó cuatro talleres, cuyo principal escenario fue el Salón “Antonio Skara”: Narración Oral, dirigido por Marisel Seltzer (con modalidades virtual y presencial), Iniciación de Dibujo con Mariano Ibazetta, Ajedrez, como siempre, de la mano de Gustavo Homann y el taller de Cómic y Manga, bajo la dirección Denis Santander. Durante junio, se sumó el de Iniciación de Corte y Confección de Guadalupe Vaquer González, en la localidad de Toay. Al cierre del periodo, fueron cinco talleres activos, con un total de 87 alumnos.
Una segunda etapa comenzó en julio. El préstamo del salón del Sindicato de Telecomunicaciones (SOEESIT La Pampa) posibilitó habilitar los talleres de Iniciación Musical, bajo la dirección de Bárbara Romero, Arte y Reciclado de la mano de Romina García, Baile Terapia dictado por Paola Sánchez e Iniciación de Corte y Confección, también a cargo de Vaquer González. En septiembre se iniciaron las reparaciones del espacio donde funciona el Archivo Histórico de la CPE, junto al salón “Antonio Skara”, lo que obligó a suspender algunas actividades presenciales. Narración Oral y Ajedrez mantuvieron sus actividades en formato virtual. La tercera y última etapa de los talleres cooperativos comenzó también en septiembre, cuando las autoridades de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales (UNLPam), facilitaron un espacio para el taller “La Memoria que Nos Une” a cargo de Natacha Jiménez Somavilla, destinado a las y los adultos mayores.
Cierre de actividades
Durante la última semana de noviembre y la primera de diciembre, los talleres cooperativos realizaron el cierre de actividades, con sus propias improntas, muestras de producciones, con clases abiertas al público, algunos en la Plazoleta de los Abuelos. El denominador común fue la entrega de los certificados de participación y el compromiso abierto para que este programa cultural se mantenga y amplíe durante el año que ya empieza.